Innata Libertad

Hace días enteros que no escribo...
Tengo tantas cosas en mi cabeza que quiero decir y contar, pero estoy en guerra con el ordenador,
 las teclas me llaman pero mi cuerpo no deja que me acerque, es una buena excusa no tener tiempo, quiero escribir pero "antes tengo que..."
Supongo que no tengo tiempo porque cuando comienzo a escribir, 
la verborragia nace a borbotones de mis dedos, 
de cada yema de mis dedos ,y no se como limitarla;
 me quedo sin plata, cancelo turnos, me asqueo en mates,
 la gente me odia por irresponsable, todo queda en segundo plano, sólo por escribir.
Los platos no se lavan, la cama no se tiende, mi cuerpo no se baña,
 el perro se desespera, los gatos duermen más de la cuenta, 
me atraganto en galletitas de agua con pasta de maní y mermelada,
y me absorben las letras y palabras.
 Quedo completamente abducida por este deseo,
me abstraigo de la realidad,
 de las responsabilidades,
se escucha de fondo el celular, los mensajes llegan,
 no son respondidos: 
info, info, info, info, info, info, info...
No lo puedo evitar.
No respondo porque ya no estoy, 
me abducen las ideas, la vida, el tema, la historia,
 el sentimiento;
 me convierto en una masa amorfa que minuto a minuto va desapareciendo, segundo a segundo, mi mente se va, 
estoy en otros lugares, estoy en mis recuerdos, estoy en el norte, o estoy en el sur, en el espacio.
El silencio me inunda, reside en mí,
 las campanitas tintinean de fondo,
 los pájaros, la brisa, siento el sutil movimiento de las cortinas, 
desaparecí, no estoy.
Me volví una con el aire.
Soy aire y letras.
Y no me importa más.
Soy invulnerable a estos trances, y no necesito sustancias, estoy en plena conciencia.
Me parece una bajeza, necesitar de meterse sintéticos u otras yerbas para poder elevar la conciencia. 
No es que no haya conocido algunos antros, nunca en mi vida, ni haya probados cosas por curiosidad, 
pero nada valía la pena;
 es el desencuentro de sí mismo bajo la mascara santa de lo natural.
Cómo si la naturaleza en su esencia más íntima y única no hubiese sido hecha también para destruirnos, 
como si no fuera la naturaleza también una violenta fuerza a la que el humano en su historia tuvo que combatir, desafiar, encarar; 
para que no se lo comiera vivo, para poder decir con el tiempo:- Naturaleza, ¡acá estoy!
¡Soy ser humano, y he dominado gran parte de tu violencia!-
A la cual la misma responde, agachando un poco la cabeza, pero nunca dejando de mirar sobre su hombro, al humano.
 Con mirada sigilosa y desconfiada;-..me las vas a pagar humano...
Con alguna de mis plantas vas a caer...
dulces plantitas santificadas que te van a quemar todas y cada una de tus redes neuronales-.
Bueno,
es importante estar despiertos y no caer,
 saber que uno puede elevar su conciencia solamente practicando algo que te mantenga atento a vos mísmo,y a tus respiraciones, sin gente alrededor,
 dejar de lado esa hartante y constante necesidad humana de querer estar siempre acompañados,
 practicando una capacidad que tenemos todas las personas:
 la capacidad de Creación.
El antídoto para cada mal: la capacidad de creación.
Dos palitos y plasticola, la capacidad de creación.
Cosas que cantar, la capacidad de creación.
Algo que pintar, la capacidad de creación.
Irme lejos a bailar para mi, la capacidad de creación.
La capacidad de Creación, Sana.
Cuántos hombres y mujeres conozco que tienen miedo de admitir que vienen mal,
como si no hubiesen sido traumados y lastimados, 
y ahora mismo la estuvieran cagando para ellos mismos y para su entorno,
 no por mentir, sino por no ser libres y vivir escondiendo partes de ellos mismos.
No es la mentira, una de las peores características del ser humano, 
más que un defecto es un derecho,
 el derecho de omitir lo que se te canta, 
el derecho de no contar tu vida, 
la mentira es el derecho del humano de negar lo que se le antoja,
 y es parte de la libertad.
Quizás no enseño lo mismo Jesús,
 pero Jesús tenía planes de hacerse famoso,
 por lo tanto le era conveniente crear su campaña para màrtires.
¡Así que nó!, no es la mentira lo peor del humano,
 sino la falta de libertad que crea el ocultamiento de algo,
 alguien, o de él mismo.
El ocultamiento, para no tener que tomar decisiones drásticas, y romper con cadenas,
 porque no saben ser libres,
 ni conocen realmente el amor a la libertad de decir:
 -¡sí! ésto soy yo!, ¡sí! en ésto me equivoqué, y está bien,
 no me voy a matar por ésto,
 no necesito tu perdón,
 necesito mi libertad de poder decirte quién soy en realidad,
no necesito tu aceptación,
sino el amor propio de poder sentirme libre de ser quien quiero ser,
 No para vós, sinó para mi propio amor a mi libertad.-
No hay mayor libertad que la autenticidad de poder ser, actuar y decir, sin ocultamientos;
 la transparencia no es una debilidad,
 la transparencia viene de la mano del humano libre.
 Donde existe ocultamiento, 
hay un ser humano limitado, un esclavo de sus propios prejuicios,
 y limitaciones mentales.
No estoy planteando cuál es más buena o más mala,
 si la mentira, o la omisión, 
sólo estoy bosquejando la idea de que la mentira, 
nos guste o no reconocerlo,
 es parte de la libertad del otro, y la omisión también, 
no podemos culpar a los demás por ésto,
 omitimos y mentimos siempre, hasta en pequeños detalles,
 y casualmente la gente que dice: -yo no miento-, 
es a la que más le gusta martirizar a los demás,
 postulándose como mejores.
Dibujo, la idea,
 de que cuando realmente nos plantamos firmes en la vida,
 con el deseo inherente de querer ser libres,
 la mentira, la omisión, y el ocultamiento, quedan relegados.
No por otros, sino para vos misma/o.
Por el amor propio a la Innata Libertad de tu Ser Auténtico.

Por lo tanto no hay mejor deseo que se le puede regalar a alguien, mas que la libertad y la autenticidad de su propio Ser.

Te deseo autenticidad, transparencia, y pobreza de ocultamientos, para que puedas ser libre, y sano.

Si salud te deseara,

 primero te desearía autenticidad y transparencia; no para otros, 

sino para que logres sentir la verdadera libertad de tu ser.

y toda la fuerza física, mental y espiritual que ésa misma autenticidad te otorga.

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Con cariño

Pequeña  Bianca

@pensamientosdebian